Nueva York es conocida como la ciudad de los rascacielos, la capital del mundo, la ciudad que nunca duerme, la gran manzana…muchas denominaciones distintas para un mismo lugar ¿verdad?
Tantos apodos para una misma urbe ya sirven de pista para entender que Nueva York es una ciudad con mucho que ver y hacer.
Conocida mundialmente, es un destino viajero por excelencia al que hay que intentar ir, por lo menos, una vez en la vida.
Un viaje a Nueva York ofrece la oportunidad de conocer la que es sin duda la ciudad más famosa del planeta y, además, descubrir el que es posiblemente el ejemplo extremo del fenómeno de globalización que vive gran parte de la sociedad actual.
Ciudad de Nueva York (USA)
La Gran Manzana es una ciudad dinámica, hiperactiva, cosmopolita y creadora de tendencias culturares y sociales de todo tipo a lo largo y ancho de sus cinco distritos; Brooklyn, Bronx, Queens, Staten Island y, el más famoso de todos, Manhattan.
Nosotros tuvimos la oportunidad de viajar a esta ciudad de excesos en un mes de mayo, cuando el tiempo comienza a ser benévolo, y constatamos que se trata de una ciudad acogedora que recibe al viajero con los brazos abiertos y tiene mucho que ofrecer.
Skyline de Nueva York
De nuestra estancia de cinco días, recorriendo a pie sus barrios más populares, apuntamos el siguiente listado de 15 cosas imprescindibles que ver y hacer en un viaje a Nueva York (USA). Que recomendamos no perderse en una visita a la Capital del Mundo.
1.- Disfrutar de la arquitectura callejeando por Manhattan
El que es posiblemente el distrito más popular de la ciudad de Nueva York, Manhattan, puede recorrerse a pie fácilmente para conocer desde abajo el alcance del ingenio arquitectónico de la Ciudad de los Rascacielos.
Imprescindible acercarse a edificios como el Flatiron, con su singular perfil triangular, el edificio Chrysler, con su llamativo diseño art decó, o las sinuosas formas de la Torre Beekman. Sin olvidarnos de otros tantos que irán apareciendo en siguientes puntos de la lista.
Rascacielos en Nueva York (Estados Unidos)
2.- Disfrutar de las vistas desde sus famosos rascacielos
El skayline de Nueva York es posiblemente el más conocido del mundo y subir a unos de sus imponentes edificios de más de 100 plantas es una actividad «obligada».
Rascacielos de Nueva York
Dos son las opciones más populares, el Empire State Building y el Top of the Rock (Rockefeller Center), y su visita permite disfrutar de vistas increíbles sobre la ciudad. Además de conocer un poco de la historia de estos colosos de la arquitectura.
Vistas sobre Manhattan desde el Empire State Building (Nueva York)
Nosotros optamos por el Empire State y subimos hasta el mirador de su planta 102. Cuanto más alto se sube más se paga, pero la experiencia merece la pena.
3.- Descubrir el ajetreo de Broadway y Times Square
Times Square es el centro neurálgico de la ciudad. Un plaza que es imposible ver vacía, siempre hay gente a todas horas y de todo tipo. Es un auténtico hervidero humano, que busca llamar la atención de sus viandantes a través de las deslumbrantes e hipnotizadoras pantallas gigantes y los innumerables luminosos de publicidad que plagan los edificios de Broadway, la calle de los teatros y los musicales.
Times Square y Broadway (Nueva York)
Todo vale para llamar la atención del espectador e incitarle a comprar o a entrar.
Times Square (Nueva York)
4.- Desconectar de la ciudad en Central Park
El pulmón verde de la ciudad es una enorme extensión de lagos, jardines y arboledas por donde pasear, tumbarse a tomar el sol, hacer deporte o simplemente abstraerse del mundanal ruido dentro de la propia urbe.
Central Park (Nueva York)
5.- Asistir a una misa Gospel en Harlem
Harlem ha ido transformándose con los años, dejando su mala fama de hace décadas para pasar a ser uno de los nuevos barrios de moda de la ciudad. Especialmente en las proximidades a Central Park, en donde nosotros pudimos disfrutar de la alegría y la hospitalidad de los feligreses de la “Second Canaan Baptits Church” (10 Rev. John P. Ladson Place).
En esta acogedora y alegre iglesia de Harlem pudimos disfrutar del ritmo, los coros y el ambiente de una auténtica misa Gospel.
2nd Canaan Baptits Church en Harlem (Nueva York)
La visita es gratuita, pero siempre se agradece un donativo.
6.- Perderse por Chinatown
La numerosa comunidad asiática de Nueva York ha dado lugar al surgimiento de una pequeña China dentro de la Gran Manzana. Un reducto de calles, siendo la principal Mott Street, con negocios asiáticos en los que es posible encontrar de todo, desde comida típica hasta productos de la medicina tradicional china.
Comercio en Chinatwon (Nueva York)
Prácticamente todo lo que puedes esperar encontrar en el país asiático lo puedes encontrar en Chinatown. Hasta el punto de que, en algunos establecimientos, todo está anunciado con los caracteres típicos orientales y el idioma principal es el chino.
Chinatown (Nueva York)
7.- Descubrir la buena pasta y los secretos de Little Italy
Numerosos inmigrantes llegaron a Nueva York procedentes la vieja Europa y los italianos fueron unos de los más numerosos.
La comunidad italiana se estableció mayoritariamente en un barrio del Bajo Manhattam, conocido como la Pequeña Italia, y en él es posible disfrutar de la esencia transalpina a través de sus numerosos restaurantes de comida italiana y tiendas de ultramarinos con buena pasta, deliciosas pizzas y su famoso prosciutto (jamón). Un gran número de estos negocios se pueden encontrar en Mulberry Street, que es la calle principal del barrio.
Little Italy (Nueva York)
8.- Imaginar ser un Bróker en Wall Street
La famosa Wall Street da cobijo a uno de los lugares de negocios estratégicos a nivel mundial, la Bolsa de Nueva York.
Paseando por el distrito financiero de la ciudad podemos tirar de imaginación para creer ser un bróker de éxito o, simplemente, conocer el ombligo económico del mundo como un viajero curioso. Así como aprender qué significado tiene la escultura del famoso «Toro» de Wall Street y por qué en el distrito financiero rehúyen de los “Osos”.
Wall Street (Nueva York)
En Wall Street también es posible ver joyas a precios inalcanzables (para la mayoría de los mortales) en los escaparates de la famosa Tifanny & Co. o conocer parte de los capítulos más relevantes de la historia norteamericana a través de la visita Federal Hall.
9.- Tocar la Estatua de la Libertad
Desde Battery Park es posible subirse a alguno de los cruceros que navegan por las aguas de la Bahía Alta de Nueva York (Upper New York Bay) para llegar hasta la Isla de la Libertad (Liberty Island), en la que se encuentra la icónica y colosal estatua que el pueblo francés regaló a los Estados Unidos a finales del siglo XIX.
Es posible acceder al interior pero, como siempre, todo depende del dinero que se esté dispuesto a pagar. La entrada, incluyendo el crucero hasta la Liberty Island, el acceso al pedestal de la estatua y la visita a la cercana Ellis Island, ronda los 20 € para los adultos.
Estatua de la Libertad (Nueva York)
Cabe la posibilidad de ver la Estatua de la Libertad desde la distancia y gratis, a través de alguno de los ferris que comunican Manhattan y New Jersey, pero no es lo mismo. La experiencia de verla de cerca, desde su pedestal, impresiona bastante más.
10.- Recordar en la Zona Cero
La reciente historia de Nueva York es tristemente conocida, pero la ciudad ha sabido levantarse de sus cenizas erigiendo un nuevo World Trade Center de imponentes rascacielos y un memorial en recuerdo del 11-S.
La visita es un auténtico flashback a aquella fatídica fecha, pero también un golpe de realidad que muestra que la vida sigue.
World Trade Center de Nueva York en construcción
11.- Cruzar el Puente de Brooklyn
Es uno de los puentes más famosos del planeta y merece ser cruzado andando, gastando suelas. Impresiona tanto ver la magnífica obra de ingeniería que lo mantiene en pie sobre el East River, con sus innumerables cables de tensión que soportan las miles de toneladas de cemento, granito, caliza y acero que conforman el puente, como las magníficas vistas sobre Manhattan, Brooklyn y el vecino puente de Manhattan Bridge.
Detalle del Puente de Brooklyn (Nueva York)
12.- Relajarse en Brooklyn Heights Promenade
Un tranquilo y relajado paseo por Brooklyn, a orillas del East river y con vistas a Manhattan, el Puente de Brooklyn, el Puente de Manhattan y la Estatua de la Libertad.
Es un lugar estupendo para sacar buenas fotografías del Skyline de Nueva York.
Vistas desde Brooklyn Heights Promenade (Nueva York)
13.- Recorrer la Quinta Avenida (5th Ave)
Uno de los ejes principales y más famosos de la ciudad. Su recorrido permite visitar varios sitios emblemáticos de la ciudad, como la Catedral de San Patricio, el Rockefeller Center y el Museo Guggenheim, o ver e ir de compras por algunas de las tiendas de lujo más famosas del mundo.
14.- Probar la mejor tarta de queso de la ciudad
Marcharse de Nueva York sin probar la tarta de queso es un auténtico error. Es sin duda uno de los platos fuertes de la ciudad y en pocos sitios como en la Gran Manzana se puede comer una igual. Tal es el nivel existente que hay incluso un concurso para elegir la mejor tarta de queso de Nueva York.
Nosotros nos decantamos especialmente por dos, tal y como ya avanzamos en nuestro artículo ¿Dónde Comer la Mejor Tarta de Queso de Nueva York? Pero sobre gustos no hay nada escrito y cada uno ha de encontrar su favorita.
15.- Visitar las Cataratas del Niagara
Esta es una propuesta trampa porque, es cierto, las Cataratas del Niágara (Niagara Falls) no se encuentran en la ciudad de Nueva York. Pero sí en el Estado de Nueva York, al que pertenece la Gran Manzana.
Así que no es difícil poder acercarse hasta este monumento natural desde la ciudad de Nueva York. Simplemente hay que revisar tarifas de hotel, si se quiere pernoctar allí, o reservar vuelos con suficiente antelación para ir y volver en el día. La visita es totalmente recomendable, tal y como ya contamos en nuestro artículo de Viaje a las Cataratas del Niágara (USA – Canadá).
Cataratas del Niágara (Estado de Nueva York)
Hasta aquí nuestro listado de la 15 cosas imprescindibles que ver y hacer en un viaje a Nueva York. Está claro que aún hay muchas más cosas que podrían hacer que nuestro listado fuera más extenso, pero ésta es una buena selección inicial para conocer la Capital del Mundo.
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