Bocairent (Valencia): Pueblo con Encanto Medieval

En el interior de la Comunidad Valenciana, a unos 100 kilómetros al sur de la capital del Turia (Valencia), se encuentra un pequeño tesoro del turismo rural español.

Se trata de Bocairent, un sorprendente pueblo que ofrece una muy interesante alternativa turística frente al cercano, y más popular, turismo de playa de la costa mediterránea.

Nosotros tuvimos la gran idea de desviarnos hasta Bocairent en el camino de regreso a Madrid (a 390 km), tras unos días de playa y ajetreo por la provincia de Alicante, y nos llevamos una grata sorpresa durante nuestra visita relámpago a esta localidad de la comarca del Valle de Albaida ubicada junto a la Sierra de Mariola.

Su visita nos trajo recuerdos de lugares con similitudes, en tierras más o menos lejanas, como la Capadocia (Turquía), Fez (Marruecos) o la medieval localidad de Frías (Burgos, España).

Todo ello debido a su singular casco histórico, con un bonito barrio medieval compuesto por un enrevesado entramado de calles y callejuelas, que salvan pronunciadas cuestas y dan acceso a antiguos edificios con llamativas fachadas en colores ocres, que recuerdan el pasado musulmán de la localidad y su posterior vinculación con la católica Corona de Aragón (año 1245).

El casco antiguo de Bocairent está declarado Conjunto Histórico-Artístico y su pintoresca estampa se puede contemplar y disfrutar desde la distancia.

Especialmente desde lo alto de la Ermita de Sant Crist que, siguiendo un zigzagueante camino hasta lo alto de una colina ubicada a las afueras del pueblo, permite contemplar la gran belleza del barrio medieval de Bocairent.

En el centro de la zona vieja se encuentra la Plaza del Ayuntamiento, a la que se accede a través del conocido como Arco del Agua, y en la que se puede disfrutar de una de las zonas más amplias de casco histórico.

Se trata de una ubicación que permite ver con perspectiva los importantes desniveles que  han tenido que salvar las calles y los edificios de la localidad para adaptarse a la orografía del terreno. En este punto del pueblo se encuentra la oficina de turismo. 

Desafortunadamente durante nuestra visita, un día entre semana, nos encontramos la oficina de turismo cerrada y no pudimos informarnos allí sobre qué ver en el pueblo.

Si esto os llegara a ocurrir también a vosotros durante vuestra visita, no os preocupéis, acercaros a la Bodega-Vinoteca de Daniel Belda que se encuentra  también en la misma Plaza del Ayuntamiento.

Si tenéis la misma suerte que nosotros, allí podréis encontrar a una amable y simpática chica que, además de atenderos eficazmente para venderos vinos y licores de la zona, os informará con todo lujo de detalles sobre lo más recomendable de la localidad.

La joven actuó desinteresada y voluntariosamente de guía improvisada de turismo y por eso desde aquí se lo queremos agradecer nuevamente.

Ella nos explicó que parte del centro de Bocairent está excavado en la roca, existiendo túneles que comunican diversos puntos de la localidad.

Algo que pudimos comprobar con claridad en el Café Les Coves (Plaza del Ayuntamiento), cuyo local se ha construido a base de picar en la dura piedra sobre la que se asienta el casco histórico.

También nos indicó que uno de los mejores momentos para visitar Bocairent es durante sus fiestas patronales de Moros y Cristianos, que se celebran a principios de febrero y están declaradas de Interés Turístico Nacional.

Si bien nos avisó del frío intenso que suele imperar en esa época, explicándonos que por eso es típico que la gente salga a celebrarlas bien abrigados bajo mantas tradicionales.

En el centro de la zona vieja de la localidad también se encuentra otro de los puntos de mayor interés, la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, cuya torre se eleva sobre todos los tejados de Bocairent y hace que no tenga pérdida el llegar hasta allí.

Se erige sobre lo que antiguamente fue el castillo árabe de Bekiren y su decoración interior muestra, según nos explicaron tiempo después, un claro ejemplo del arte valenciano.

El último punto de interés que tuvimos la oportunidad de ver durante nuestra escapa a Bocairent lo representan el conjunto de cuevas que conforman Las Cuevas de los Moros (Les Covetes Dels Moros).

Se encuentran en una pared de roca vertical que se sitúa  fuera del casco histórico, en el cercano Barranc de la Fos, y hasta allí se puede llegar siguiendo una senda acondicionada que termina en unas escaleras de acceso al interior de las cuevas.

Sobre la pared de roca se pueden divisar varias decenas de ventanas que dan luz a cámaras interiores, distribuidas a varios niveles, que se cree fueron excavadas sobre la piedra entre los siglos X y XI. A día de hoy el motivo de su origen no está totalmente claro.

Las cuevas son realmente dignas de ver y, tal y como mencionábamos al principio, nos recordaron ligeramente (a pequeña escala) a las excavaciones que se puede ver en Goreme (Capadocia).

Hay visitas guiadas hasta Les Covetes todos los días, exceptuando los lunes (Martes-Viernes: 11 a 14 h., Sábados-Domingos: 11 a 14 h. y 16 a 18 h.).

La entrada cuesta el módico precio de 1,5 € y se adquiere en la caseta de la Cava de San Blai (antiguo depósito de nieve), ubicada en el paseo exterior del norte del barrio medieval (próximos a la depuradora del pueblo).

En definitiva, sabiendo que hay muchas más cosas que ver y hacer en Bocairent, hemos presentado aquí brevemente todo lo que nosotros pudimos ver y visitar durante nuestra visita relámpago de unas horas.

Que no fue poco y que, tal y como contamos, da una buena idea de por qué merece la pena acercarse a este interesante pueblo del interior de Valencia. Seguro que volveremos.