Sofía, la capital de la República de Bulgaria, es posiblemente uno de los destinos urbanos más económicos de la vieja Europa.
A pesar de ser la ciudad búlgara de mayor tamaño y población, superando el millón de habitantes, es una ciudad que se puede conocer en un viaje de pocos días.
Muchas de sus atracciones turísticas se ubican en el centro de la ciudad y eso hace que puedan ser fácilmente visitadas a pie, gastando suelas.
Su patrimonio cultural, arquitectónico e histórico es amplio y, al igual que otras capitales ubicadas en la Península de los Balcanes, actualmente se encuentra inmersa en un proceso de transformación continuo hacia una imagen más globalizada.
Este cambio está afectando a su imagen y también de forma directa a su economía, por lo que es posible que este destino se encarezca de aquí a unos años.
En la actualidad la moneda oficial es el Lev Búlgaro, pero lo lógico es que antes o después cambie al euro (1,95 Levs equivalen a 1 €).
Nosotros viajamos a Sofía para una visita de tres días, tiempo suficiente para poder conocer su patrimonio principal y poder hacer alguna excursión a sus alrededores.
Como resultado de nuestra experiencia en Sofía, a continuación os proponemos todo aquello que recomendamos no perderse.
Contenido
Como antes indicábamos, es en el centro de Sofía en donde se concentra el mayor número de puntos de interés a visitar.
Un espacio en el que se mezcla el patrimonio histórico con el más actual, todo ello en torno a un eje principal que constituyen el Bulevar del Zar (Tsar) Osvobodite y la Plaza del Príncipe Alejandro I.
Fue el primer monumento que nos llamó la atención al llegar al centro de Sofía, una imponente estatua de mujer que se eleva sobre las alturas.
Se trata de Santa Sofía, mártir venerado por la iglesia ortodoxa, que con su esculpido cuerpo dorado cubierto por un voluptuoso vestido negro de bronce da la bienvenida al centro de la ciudad.
Estatua de Santa Sofía (Bulgaria)Se erige junto a un ajetreado cruce que da paso a la Plaza de la Independencia (пл. независимост), en donde se ubican algunos de los edificios institucionales más importantes de la ciudad.
Sin duda se trata del monumento arquitectónico más conocido de Sofía, una impresionante catedral construida entre 1882 y 1912.
El exterior es increíblemente llamativo, un conjunto de cúpulas de diferentes tamaños que se superponen a varias alturas conformando un perfil muy singular.
El interior está decorado con impresionantes suelos de mármol, numerosos mosaicos venecianos e increíbles murales.
Catedral de Alexander Nevsky en Sofía (Bulgaria)Sin olvidar que bajo el suelo de la catedral se encuentra una cripta con obras artísticas de carácter religioso, pero para acceder es necesario pagar una entrada de 6 Levs (3 €).
Por último indicar que, al ubicarse en el centro de una gran plaza, desde los alrededores de la catedral se pueden obtener muy buenas panorámicas del edificio. La lástima es que siempre hay coches y autobuses turísticos aparcados junto a la catedral que desmejoran las vistas.
Están ubicados en el antiguo Palacio Real de la ciudad, al que la República le buscó otro uso alejado al de ser residencia de reyes.
Este singular edificio de fachada amarilla se encuentra al final de la Plaza del Príncipe Alexander I.
El museo de arte expone una amplia colección de obras artísticas búlgaras, del medievo hasta la actualidad. La visita cuesta 6 Levs.
El museo etnográfico, como no podría ser de otra forma, alberga elementos significativos del folclore nacional. Para su visita también hay que pagar entrada, 3 Levs.
Se trata de una pequeña, pero llamativa, iglesia construida entre 1912 y 1914. Sus cinco cúpulas doradas constituyen el elemento más característico y llamativo del edificio, mostrándose increíblemente brillantes en días de buena luz.
Iglesia Rusa de San Nicolás en Sofía (Bulgaria)Según cuentan, muchos búlgaros tienen por costumbre depositar sus deseos, expresados en papel, en los bajos de esta iglesia dentro del sarcófago de un antiguo obispo reconocido como santo.
Un edificio de principios del siglo XX con un marcado carácter clásico en su fachada, en la que destaca su entrada con columnas y relieves mitológicos.
Aunque está fuera del eje principal que antes indicábamos, localizar el teatro no tiene pérdida. Simplemente hay que seguir la calle de Georgi Benkovski, que sale frente a la iglesia rusa, para llegar hasta este monumento arquitectónico.
Templo religioso construido en el siglo VI que es culpable del nombre actual de la capital Búlgara, que viene desde el siglo XIV.
Hay dos mercados al aire libre que llamaron especialmente nuestra atención durante nuestro tiempo en Sofía.
Junto a la Catedral de Alejando Nevsky se encuentra este pequeño mercado con puestos de antigüedades de todo tipo.
Mercado de Antigüedades en Sofía (Bulgaria)Es como un pequeño rastro de artilugios de otra época que ofrecen un entretenido paseo a los que lo visitan. Al no tener muchos puestos y no sufrir aglomeraciones, se puede recorrer con total tranquilidad.
Algo más alejado del centro, en el Bulevar de Stefan Stambolov, encontramos el mercado tradicional de la ciudad.
Numerosos puestos al aire libre con productos frescos, y otros de primera necesidad, ocupan el bulevar y atraen a la población local para hacer la compra diaria.
Mercado tradicional en Sofía (Bulgaria)Merece mucho la pena conocerlo y disfrutarlo, ya que en él se pueden comprar productos diversos (quesos, embutidos, encurtidos,…) a muy buen precio.
En sus alrededores también hay otros puestos o locales en los que poder parar a tomar algo mientras se contempla el día a día de los habitantes de la capital búlgara.
Si el tiempo no acompaña, el mercado central de Sofía puede ser una buena opción para ver un mercado típico local resguardados de las inclemencias meteorológicas.
Se trata de un edificio que alberga puestos de alimentación, alguno con comida para llevar, pequeños restaurantes y tiendas (como los de la foto).
Se encuentra en el Bulevar Maria Luiza, a la altura de la Mezquita Banya Bashi y los Baños Centrales de Sofía (Tsentralna mineralna banya). Otros dos edificios singulares de la ciudad que merece la pena visitar.
El punto de la ciudad más cosmopolita, más transitado y con más alternativas para comer y tomar algo se encuentra en el Bulevar Vitosha y sus alrededores. Una zona que representa el mejor ejemplo del cambio que está sufriendo la ciudad hacia una imagen más moderna y globalizada. Locales de todo tipo y para todos los gustos, entre los que se encuentran las grandes cadenas y franquicias internacionales, se están implantando en esta zona.
Bulevar Vitosha en Sofía (Bulgaria)Si se quiere buscar algo más típico, como decíamos con anterioridad, en el mercado tradicional del Bulevar Stefan Stambolov y en sus alrededores también se puede comer y tomar algo a precios populares.
Es una zona que mayoritariamente sólo frecuentan los habitantes de la ciudad, por lo que es una buena oportunidad para conocer de primera mano la vida cotidiana de Sofía.
La cocina tradicional búlgara es una mezcla de las cocinas eslava, griega y turca, y en torno al bulevar de Stefan Stambolov es posible encontrar algunos pequeños restaurantes en los que probarla.
Hay que decir que por esta zona nos aconsejaron no transitar al anochecer, porque parece ser que se vuelve algo insegura, pero nosotros nos alojamos en sus alrededores y no tuvimos ningún tipo de problema deambulando por allí ya entrada la noche.
Sofía ofrece grandes chollos para alojarse. Es una ciudad barata y eso se nota también a la hora de buscar hotel.
En nuestro caso nos alojamos en un hostel próximo al centro, en Bratja Miladinovi, por 27 € la noche. La zona transmitía algo de inseguridad por la noche, pero la realidad es que no tuvimos problemas a lo largo de nuestros tres días en Sofía.
El centro de Sofía se puede recorrer fácilmente a pie, gastando suelas. Pero también existe una buena red de transporte público, formada por el metro, tranvías, autobuses y trolebuses, perfecta para poder desplazarse por todas las zonas de la ciudad. Incluso la estación principal de trenes y la de autobuses están cerca del centro.
Tranvía en el centro de Sofía (Bulgaria)Pero sin duda, para alejarse del centro, nosotros recomendamos subirse al tranvía. Por 1 Lev (0,5 €) se puede cruzar toda la ciudad de punta a punta disfrutando de las vistas que ofrecen los antiguos vehículos que conforman la red de tranvías de la capital búlgara.
Nosotros llegamos a Sofía procedentes de Skopje, la capital de la República de Macedonia. Para ello viajamos en autobús desde Skopje hasta la estación de autobuses de Sofía, al norte del centro de la ciudad.
El billete de autobús en Skopje nos costó 1040 Dinares Macedonios (MKD) por persona, aproximadamente unos 17 Euros al cambio, y tardamos unas 5 horas en llegar hasta Sofía.
Autobús de Skopje (Macedonia) a Sofía (Bulgaria)Hay cuatro autobuses diarios de Skopje a Sofía (08:30, 15:00, 22:00 y 24:00 horas) y hay que reconocer que el viaje se puede hacer algo pesado si, como a nosotros, os tienen retenidos en la frontera para hacer controles de seguridad.
Durante nuestro viaje la policía fronteriza nos pidió a todos los pasajeros que bajáramos del autobús, que recogiéramos nuestras mochilas y maletas del portaequipajes y que nos pusiéramos en fila india frente al equipaje para, uno a uno, revisar nuestra documentación, hacernos preguntas y registrar los equipajes si les parecía oportuno. Toda una aventura, aunque suponemos que para ellos es simple rutina.
Para salir de Sofía, de vuelta a casa, todo fue mucho más sencillo. El centro de Sofía está a poco más de 10 kilómetros del aeropuerto y el trayecto en taxi nos costó unos 10 Levs (5 Euros) desde el hostel. Muy fácil, rápido, cómodo y barato.
La visita al Parque Natural de Vitosha, a unos 10 kilómetros de Sofía, es una buena excursión de un día en los alrededores de la capital búlgara.
La cercanía de la Montaña de Vitosha a la capital búlgara favorece el que muchos residentes de Sofía se acerquen a este paraje natural para disfrutar de su impresionantes bosques, de ríos de aguas frescas, de rutas senderistas y de varios monasterios.
Montaña de Vitosha en BulgariaLlegar hasta este paraje es muy sencillo y económico, hay tranvías que van desde el centro de Sofía hasta la base de la montaña y el billete sólo cuesta 1 Lev (0,5 €).
Para más información detallada sobre esta maravilla natural entra en nuestro artículo «Vitosha: El paraíso natural de Sofía (Bulgaria)«.
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